La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) hace directamente responsable del bienestar de las trabajadoras a Roberto Pihuala, coordinador del Consejo Escolar de Cipolletti, máximo responsable de garantizar el protocolo de seguridad e higiene en el sector público educativo.
“El miércoles por la tarde la empresa Serviplag realizó la desinfección de la Escuela Laboral 4 y el jueves, cuando las tres trabajadoras concurrieron al establecimiento a pesar de la suspensión de clases, comenzaron a sentir náuseas, dolores de cabeza y un malestar generalizado en vías respiratorias”, relató Cristina Rodríguez Biain, delegada de ATE.
De acuerdo al protocolo establecido para estos casos, las autoridades educativas deben contar con el certificado del pesticida empleado, algo que no ocurrió. Informalmente ATE fue notificada del uso de Keeptrin, producto que en una búsqueda rápida en internet contiene bajo contenido tóxico. Todo sugiere entonces, que al menos se complementó la desinfección con otro insecticida.
“Es muy grave lo que también ocurrió con la ART Horizonte, que no pudo garantizar una cama para el Sanatorio Río Negro de Cipoletti. Las compañeras debieron ser trasladadas a Cinco Saltos”, denunció Rodríguez Biain. Las tres trabajadoras PSA aguardan los resultados de un nuevo estudio médico que les ha sido realizado durante la madrugada.