Para la central obrera esta nueva medida no es más que legalizar el gatillo fácil, ya que los disparos con armas de fuego quedan a criterio de las fuerzas de seguridad, pueden ser realizados inclusive por la espalda y sin necesidad de dar la voz de alto.
“La resolución es muy grave y viene a profundizar descaradamente las políticas represivas del gobierno nacional. Llamamos a toda la población a rechazar esta medida que legaliza la pena de muerte en nuestro país”, señaló Rodolfo Aguiar Secretario General de ATE y CTA Autónoma de Río Negro.
“Observamos con suma preocupación un Estado que sigue bregando por la utilización de las fuerzas de seguridad contra el pueblo”, continuó sobre la resolución 956/2018 que modifica el Reglamento General para el empleo de las armas de fuego por parte de los miembros de las fuerzas de seguridad.
“No es casual que lancen estas medidas cuando no pueden resolver el hambre que azota nuestro país bajo un régimen de ajuste y exclusión”, concluyó.
La nueva normativa, que tendrá jurisdicción para la Policía Federal, Gendarmería, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria, genera un marco jurídico que habilita los fusilamientos en una serie de situaciones como: cuando el presunto delincuente posea un arma letal, aunque luego de los hechos se comprobase que se trataba de un símil de un arma letal; cuando tenga la capacidad cierta o altamente probable de producir, aún sin el uso de armas, la muerte o lesiones graves a cualquier persona; cuando se fugue luego de haber causado, o de haber intentado causar, muertes o lesiones graves, entre otras que dejan lleno de zonas grises la actuación de las fuerzas de seguridad por puro criterio propio.