La jornada, con réplicas en todo el país, tuvo en Río Negro escenarios clave: en Roca, frente a la delegación del ministerio de Trabajo de la Nación; en Viedma, en la sede de PAMI; y en Bariloche, delante el Hotel Islas Malvinas de la obra social del personal de las Fuerzas Armadas (IOSFA), donde se registraron despidos hace pocos días.
“Nosotros queremos que el Gobierno nacional retome las negociaciones con nuestro sindicato para que no haya un solo estatal despedido por Macri fuera del Estado en la Argentina”, señaló Rodrigo Vicente, secretario general de ATE, desde General Roca.
“Pero asimismo queremos dejar en claro que no vamos a tolerar errores o fisuras: no puede ser que el mismo Estado que prohíbe los despidos por decreto, eche trabajadores como en el caso de la IOSFA”, agregó.
En otro tramo, Vicente apuntó contra las irregularidades en Pami Río Negro, donde el Estado paga desde hace meses alquileres de edificios que no usa, pidiendo una investigación al respecto. Además del reiterado pedido sobre la construcción de mamparas en los box de atención y la entrega de los elementos de protección personal (EPP) a los trabajadores.
“No sólo venimos a defender a nuestros compañeros y el salario, sino también los recursos públicos: en tiempos de crisis económica hay que ser más honesto que siempre, hay que cuidar los dineros de todos más que nunca y hay que gravar a los ricos y los ganadores del modelo neoliberal”, señaló Vicente.
Fueron miles las trabajadoras y trabajadores echados en el Estado entre diciembre de 2015 y diciembre 2019 en múltiples organismos de la administración pública y producción. Una porción mínima ha recuperado su puesto –muchos en la provincia de Río Negro-, pero otros pasaron a engrosar el ejército de familias con ingresos por debajo de la línea de pobreza, dificultados además de acceder al Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).
En cada una de las actividades desarrolladas en Río Negro se distribuyeron barbijos: una experiencia solidaria que ATE viene impulsando desde el inicio de la pandemia, con insumos y elaboración propia para miles de coprovincianos.
