El Frente Previsional de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de Río Negro -integrado por Jubilados y trabajadores de ANSES y PAMI- cuestionó con dureza la intención de subir la edad jubilatoria de las mujeres argentinas a 65 años.
Esta iniciativa -que tuvo como punta de lanza la decisión del Gobierno Nacional de subir la edad jubilatoria de las mujeres que no cuentan con los años de aportes y apuntalada en las declaraciones mediáticas del titular del PAMI, Carlos Regazzoni- encuentra hoy su aval en la recomendación del Fondo Monetario Internacional (FMI).
La propuesta del organismo internacional -incluida en el Reporte 16/346 tras la visita los técnicos del organismo- plantea «corregir el desbalance» mediante: la suba de la edad de jubilación de las mujeres de 60 a 65 años; la reducción del haber inicial, bajando la relación entre el haber jubilatorio inicial y el salario; la modificación de la fórmula de actualización de la Ley de Movilidad; y la transferencia de programas sociales de Anses a Desarrollo Social o Educación, como ya suceda con el plan Conectar Igualdad.
“Este gobierno ya ha dado inicio al proceso de incremento de la edad jubilatoria con la aprobación e implementación de la Pensión Universal para Adultos Mayores en la que el requisito para ambos sexos es tener 65 años cumplidos», manifestó Luciano Pedraza, Paritario Nacional de ATE en ANSES y agregó: En un país donde el desempleo va en aumento y las posibilidades sean escasas, subir la edad jubilatoria es una decisión desacertada».
«Resulta increíble que hoy se diga que el régimen previsional no es sustentable. En realidad aparece como una pantalla a la necesidad que tiene este Gobierno de malversar los fondos que aseguran la vida pasiva de nuestros abuelos», señaló Rodrigo Vicente, trabajador de Pami Río Negro y agregó: «Nada ha cambiado en nuestro país. Aunque sea de otro color político, el Gobierno sigue ajustando con el pueblo al querer llevar la edad jubilatoria de las mujeres a 65 años».
