La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) expulsó del sindicato al médico Rafael Orellana, apenas tuvo conocimiento que prestaba servicios en la Guardia del Hospital de Cinco Saltos y en la de Allen, estando condenado desde 2018 a diez meses de prisión y a dos años de inhabilitación profesional por abuso sexual a una menor.
“Desde que tomamos conocimiento de las denuncias que pesan sobre Orellana, solicitamos a nuestra conducción provincial y nacional la expulsión de este profesional que desde hacía cuatro meses cumplía funciones en la Guardia del Hospital de Cinco Saltos”, informó Dora Fernández, secretaria general de la seccional Norte de ATE.
“A su vez, solicitaremos a las autoridades competentes que se dé cumplimiento a las condiciones de ingreso e impedimentos a la administración pública provincial indicadas en la ley 3487. Si bien se entiende que las autoridades ministeriales solicitaron su inmediata renuncia, no puede volver a ocurrir en ningún organismo que se ponga en riesgo la integridad física de las pacientes y trabajadoras”, agregó la dirigente.
De esta manera, tal como ocurrió con el Secretario de Turismo, Deporte y Cultura de la seccional Bariloche de ATE, acusado y detenido por abuso sexual de una menor, el gremio volvió a recurrir a su Estatuto Social, que condena en su artículo 13 la ejecución de actos susceptibles que acarreen graves perjuicios a la asociación sindical.
Asimismo, ATE demanda elevar los estándares de control sobre los antecedentes penales de los ingresantes a la administración pública de Río Negro, regidos en la ley 3487 que señala, en su capítulo dos, el impedimento a quien “haya sido condenado por delito doloso (…) o quien tenga proceso penal pendiente que pueda ocasionar estas condenas” y quien “haya sido sancionado con exoneración en la administración pública nacional, provincial o municipal”.
En este sentido, el gremio exige una investigación exhaustiva que delimite las responsabilidades de los funcionarios que deben hacer cumplir esta norma.
Por último, ATE ratifica que en sus filas no hay lugar para abusadores ni maltratadores y que se encuentra al frente de la pelea por los derechos de las mujeres y los niños víctimas de cualquier tipo de violencia y abuso.
“Desde que tomamos conocimiento de las denuncias que pesan sobre Orellana, solicitamos a nuestra conducción provincial y nacional la expulsión de este profesional que desde hacía cuatro meses cumplía funciones en la Guardia del Hospital de Cinco Saltos”, informó Dora Fernández, secretaria general de la seccional Norte de ATE.
“A su vez, solicitaremos a las autoridades competentes que se dé cumplimiento a las condiciones de ingreso e impedimentos a la administración pública provincial indicadas en la ley 3487. Si bien se entiende que las autoridades ministeriales solicitaron su inmediata renuncia, no puede volver a ocurrir en ningún organismo que se ponga en riesgo la integridad física de las pacientes y trabajadoras”, agregó la dirigente.
De esta manera, tal como ocurrió con el Secretario de Turismo, Deporte y Cultura de la seccional Bariloche de ATE, acusado y detenido por abuso sexual de una menor, el gremio volvió a recurrir a su Estatuto Social, que condena en su artículo 13 la ejecución de actos susceptibles que acarreen graves perjuicios a la asociación sindical.
Asimismo, ATE demanda elevar los estándares de control sobre los antecedentes penales de los ingresantes a la administración pública de Río Negro, regidos en la ley 3487 que señala, en su capítulo dos, el impedimento a quien “haya sido condenado por delito doloso (…) o quien tenga proceso penal pendiente que pueda ocasionar estas condenas” y quien “haya sido sancionado con exoneración en la administración pública nacional, provincial o municipal”.
En este sentido, el gremio exige una investigación exhaustiva que delimite las responsabilidades de los funcionarios que deben hacer cumplir esta norma.
Por último, ATE ratifica que en sus filas no hay lugar para abusadores ni maltratadores y que se encuentra al frente de la pelea por los derechos de las mujeres y los niños víctimas de cualquier tipo de violencia y abuso.
