La CTA Autónoma de Viedma repudia la represión sobre familias desalojadas en el barrio “2 de enero” y responsabiliza al gobierno municipal de Mario Francioni por desconocer la emergencia habitacional que vive la ciudad. En este sentido, la central obrera demanda una mesa de diálogo que aborde la grave situación de miles de familias imposibilitadas de acceder a la tierra y la vivienda.
“Es la autoridad local la que debe garantizar el acceso a la tierra y la vivienda. Se esconden en la decisión del fiscal Guillermo Gonzalez Sacco en vez de brindar una solución a las familias allí instaladas”, manifestó Hugo Aranea, secretario general de la CTA Autónoma de Viedma.
El dirigente fue muy crítico del accionar represivo con topadoras arrasando construcciones precarias de chapa, nylon y cantoneras, y del proceso de judicialización de los vecinos.
“Vemos que la disposición con la que el Secretario de Gobierno del Municipio accede a condenar, ocultando las condiciones de vulnerabilidad social de estas familias, no es la misma con la que se debiera buscar una solución a esta situación. Lejos de eso se accede rápidamente a la criminalización, judicialización y persecusión de las familias acorraladas por el abandono de políticas publicas para los sectores mas empobrecidos”, señaló Aranea.
Asimismo, la CTA Autónoma denunció que hacia el final del barrio “2 de enero” hay un canal de aguas servidas junto a un basural que amenaza las condiciones sanitarias de los habitantes.
“¿Nos preguntamos otra vez si al gobierno municipal no le parece más urgente utilizar las máquinas de las que dispone para limpiar y mejorar las condiciones de vida de vecinos en vez de emplearlas para profundizar la precariedad en la que se encuentran?”, se preguntó retórico Aranea.
Por último, la central obrera demandó todos los esfuerzos del Ejecutivo y el Consejo Deliberante viedmense, para encontrar una solución urgente.