La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) reclama la separación en el cargo de una jefa del Hospital Accame de Allen, acusada en reiteradas oportunidades de maltrato laboral. Además, exigió medidas disciplinarias.
Se trata de la jefa de Servicio Marcia San Martín, denunciada por el cuerpo de enfermeros de prácticas abusivas violatorias de la ley de Trabajo. Ella misma reconoce actuar bajo el acompañamiento de la jefa de Unidad Silvia Panozo.
“Estas prácticas de violencia laboral ejercidas en forma repetitiva sobre todos los trabajadores del sector, no sólo constituyen una conducta arbitraria y fuera de reglamentación, sino que también perjudican la salud psicofísica de los trabajadores”, señaló Andrea Pravata, secretaria administrativa de la seccional Allen de ATE.
Según el relato de los trabajadores recogido por ATE, San Martín obliga al cuerpo de enfermería a cubrir guardias extras no programadas ni obligatorias, sin descanso ni consentimiento.
Además, reconocieron recibir amenazas, como la efectuada por Panozo a través de un llamado telefónico: “Cuando te hicimos la entrevista de ingreso te advertimos que estarías a total disposición del servicio, de lo contrario estás sancionado”, escucharon los trabajadores desde el otro lado de la línea.
“No estamos en la edad media”, sentenció Carolina Suárez, secretaria general de la seccional Allen de ATE. “Las autoridades y jefes deben terminar de saber que tienen la obligación de respetar los derechos y garantías que tenemos los trabajadores. No somos empleados suyos, sino que estamos a servicio de nuestra comunidad”.
Se trata de la jefa de Servicio Marcia San Martín, denunciada por el cuerpo de enfermeros de prácticas abusivas violatorias de la ley de Trabajo. Ella misma reconoce actuar bajo el acompañamiento de la jefa de Unidad Silvia Panozo.
“Estas prácticas de violencia laboral ejercidas en forma repetitiva sobre todos los trabajadores del sector, no sólo constituyen una conducta arbitraria y fuera de reglamentación, sino que también perjudican la salud psicofísica de los trabajadores”, señaló Andrea Pravata, secretaria administrativa de la seccional Allen de ATE.
Según el relato de los trabajadores recogido por ATE, San Martín obliga al cuerpo de enfermería a cubrir guardias extras no programadas ni obligatorias, sin descanso ni consentimiento.
Además, reconocieron recibir amenazas, como la efectuada por Panozo a través de un llamado telefónico: “Cuando te hicimos la entrevista de ingreso te advertimos que estarías a total disposición del servicio, de lo contrario estás sancionado”, escucharon los trabajadores desde el otro lado de la línea.
“No estamos en la edad media”, sentenció Carolina Suárez, secretaria general de la seccional Allen de ATE. “Las autoridades y jefes deben terminar de saber que tienen la obligación de respetar los derechos y garantías que tenemos los trabajadores. No somos empleados suyos, sino que estamos a servicio de nuestra comunidad”.
