Con un alto acatamiento se lleva adelante por estas horas la segunda jornada de paro de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) en demanda del correcto pago de los incrementos acordados en la última negociación paritaria.
El gremio también exigió el fin de la precarización laboral que todavía se mantiene en distintos ámbitos del Estado. En este sentido, reclamó la regularización contractual, que en la actualidad se encuentra prácticamente estancada.
En estas jornadas de huelga, que incluyeron en su primer día protestas en los puentes que unen Cipolletti con Neuquén, Viedma con Patagones y el ingreso a la ciudad de Bariloche, así como movilizaciones en Regina y El Bolsón, entre otras ciudades de la provincia, el gremio también denunció la discriminación salarial entre distintos ministerios y organismos y la precarización laboral por la cual hay más de 400 trabajadores con “hora cátedra” que realizan tareas principalmente en escuelas y consejos escolares, pero también en otros organismos, por lo que este número podría ser mucho mayor.
“Vemos con preocupación un retroceso importante en materia de políticas laborales en la provincia, lo que afecta a los trabajadores y a todas las familias. Garantizar la estabilidad laboral es fundamental”, dijo Rodrigo Vicente, secretario general de ATE Río Negro y advirtió: “De seguir sin repuestas nos veremos empujados a tomar nuevas medidas de fuerza”.
Como fue señalado anteriormente, ATE pide el regreso a la política de regularización que puso fin a las becas y a la explotación laboral, como así también el pase a planta permanente de trabajadores ingresados durante los dos últimos años y el avance concreto sobre el convenio colectivo de trabajo que fue aprobado por ley provincial.
Asimismo, los estatales también reclaman la eliminación de los monotributos en el Estado, exigiendo su pronta regularización y la estabilidad laboral para trabajadores precarizados bajo la modalidad de «Programa de Inclusión Laboral» (PRIL), quienes, cobrando 14.000 pesos, realizando las mismas tareas y cumpliendo el mismo horario que un estatal, fueron notificados por teléfono que no van a continuar trabajando y sin posibilidades de ser incluidos.
Entre otros puntos, también se demanda la necesidad de discutir el punto de guardia entre los trabajadores de la salud, la equiparación de salarios entre carteras; la falta de personal en áreas clave como el Ministerio de Desarrollo Humano y la SENAF.