A partir que en las últimas semanas resulta notorio que se ha producido un cambio en las coberturas y en las políticas de los medidos de comunicación estatales, la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma considera en este momento alevosa la utilización político-partidaria que el Gobierno Provincial hace del Canal 10, LU19 y otros como la FM púlica o la AM de Sierra Colorada.
«Estamos acostumbrados a que todos los gobiernos intenten usar los medios de comunicación estatales en su beneficio, pero ninguno llegó tan lejos como este. No somos profesionales en la materia, pero se deben estar violando normas, si se tiene en consideración que se trata de medios que sostenemos todos y por lo tanto son propiedad de los rionegrinos. Seguro que una empresa privada podrá actuar de otra manera», sostieneRodolfo Aguiar, Secretario General de CTA Autónoma de Río Negro.
«El uso partidario del Gobierno es alevoso y hasta inmoral, ya que no solo censuran a dirigentes y organizaciones, sino que además usan los medios públicos para montar campañas de desprestigio dirigidas a quienes no pueden doblegar», continúa el dirigente rionegrino y asegura que: «La deformación de la realidad y persecusión interna de los trabajadores es continua y va en aumento. El presidente Buteler acaba de despedir a un trabajador por asistir a una cena organizada por un gremio. Cuesta entender esto en democracia».
Finalmente el máximo referente de la central obrera advierte: «En unos días nos vamos a movilizar hasta la sede del canal de televisión. No debemos aceptar que los medios que funcionan gracias a los impuestos que pagamos todos y algunos periodistas, muy pocos, que se olvidaron que trabajan en el Estado, se presten de manera inmoral para mentirle a la comunidad. Debe ser triste cobrar solo por hacer propaganda oficial»…
El Presidente del Directorio de Radio Televisión Rionegrina Sociedad del Estado (RTRNSE), Rodrigo Buteler, a ordenado llevar a cabo por los medios de prensa públicos y a su cargo, una campaña contra los dirigentes sindicales y algunos gremios, a los efectos de hacerlos aparecer como violentos y para ello apelan a una absoluta desinformación y permanente mentira, reproduciendo imágenes antiguas y de protestas que llevaron a cabo hace mucho tiempo en algunos municipios que no le responden al Gobernador.
La central obrera señala que uno de los hechos más repudiables y mediante el cual se intenta un disciplinamiento del resto de los empleados de esos medios, es la cesantía producida hace 24 horas de un trabajador al que, el propio Buteler, le mencionó como única y exclusiva causal de su despido, haber asistido este fin de año a una cena organizada por ATE.
Cabe señalar que el sindicato estatal realiza todos los fin de año y en el mes de diciembre una cena para los afiliados, cursando invitaciones también a distintos periodistas, dentro de ellos a todos los de Canal 10, además de los camarógrafos del mismo.
Por otro lado, la CTA pudo conocer a través de la voz de propios trabajadores, que los funcionarios del Canal les prohibieron realizar notas a dirigentes de ATE y de la UNTER, cubrir protestas y asistir a conferencias convocadas por esas organizaciones.
La central sindical no descarta convocar en las próximas semanas a una protesta en las puertas del mencionado canal de televisión en la ciudad de General Roca, a los efectos de demandar que los medios de comunicación estatales y públicos, cuyo funcionamiento sostienen todos los rionegrinos con el pago de impuestos, recuperen el rol esencial para el que fueron creados, que es el de mantener informada a toda la comunidad de manera fehaciente y con la verdad sobre los hechos que se suceden en todo el territorio provincial, dejando de lado cualquier utilización partidaria de los mismos,como sucede en este momento en favor de Juntos Somos Río Negro.
Por último, la CTA no incluye en los fuertes cuestionamientos a las trabajadoras y a los trabajadores de los mencionados medios públicos, ya que no tienen ningún tipo de responsabilidad de dirección y además se sienten, en su inmensa mayoría, muy mal con la ilegalidad de las ordenes que les imparten y las continuas persecusiones de las que son objeto.