Desde la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma de Río Negro se cuestionan con firmeza las últimas definiciones tributarias y económicas delGobierno Nacional de Mauricio Macri, que golpean nuevamente y con dureza a todos los patagónicos.
Por un lado, con la Ley 27430/17 de Reforma Tributaria –que fuera aprobada tras varias jornadas de represión en las calles- el Congreso dio por tierra con la denominada “zona patagónica” para los principales combustibles líquidos. La nueva tarifa comenzará a regir a partir del 1 de marzo. En tanto que, de un momento a otro, se espera el anuncio de un nuevo aumento de todos los combustibles, que llegaría al 7 por ciento, agravando aún más la situación para los hogares patagónicos.
Sometiéndose al lobby de las petroleras, el Gobierno de Macri quita beneficios para el sur, mientras suma nuevos incrementos.
«Las políticas del Gobierno Nacional siguen afectando a todos los habitantes de las provincias patagónicas. Existe un empecinamiento en votar leyes que beneficien solo a los grandes empresarios nacionales y extranjeros que operan en esta región”, señaló Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE y CTA Río Negro y completó: «Es evidente que las petroleras tienen mayor poder de lobby que los productores, las economías regionales están siendo devastadas por las políticas actuales».
La “zona patagónica” consistía en un reconocimiento que –desde 2015- permitía compensar el mayor gasto en combustible de los habitantes del sur del país, generado a partir de la necesidad de trasladarse mayores distancias. Al mismo tiempo, significaba una retribución para la zona de donde se extraen los hidrocarburos. Si bien este beneficio estaba vigente para toda la Patagonia desde 1991, el norte de la Patagonia fue incorporado dos años atrás.
Con la Reforma Tributaria se derogó el artículo 7º que exceptuaba del pago del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC) a los consumidores de las provincias de Neuquén, La Pampa, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego, la Antártida e Islas del Atlántico Sur, el departamento de Malargüe en Mendoza y el partido de Carmen de Patagones en Buenos Aires. Así las cosas, la nueva norma en el artículo 135 elimina tal excepción tanto para el gasoil, como el diésel oil y el kerosene.
La eliminación de esta excepción perjudica notablemente a las economías regionales, pero también a los vecinos de a pie ya que además, por el costo de transporte, la modificación rápidamente se trasladará a los precios minoristas, golpeando nuevamente a los que menos tienen. A todo esto sumará la nueva suba de todos los combustibles, estimada entre el 5 y 7 por ciento, que se viene anticipando y que sin duda se anunciaría en las próximas horas.
La CTA repudia al Gobierno Nacional de Cambiemos, con Mauricio Macri a la cabeza y sus representantes en la provincia Lorena Matzen y Sergio Wisky, quienes con un cinismo total ceden ante el lobby de las petroleras, sin importarles en lo más mínimo el bienestar de la gente a la que dicen representar.