La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de Río Negro realizará este viernes su Congreso Provincial Ordinario y Extraordinario de delegados, con la participación de más de 1500 afiliados que se congregarán desde las 11 en Sala del Libertador de la ciudad de Viedma (Balbín 730).
Esta actividad pondrá a votación de los congresales acreditados la Memoria y Balance 2018 del sindicato y delineará las políticas directrices para los siguientes doce meses. No será una instancia orgánica más, sino la última de una conducción de ocho años liderada por Rodolfo Aguiar.
En esta etapa, ATE ha logrado en Río Negro un desarrollo exponencial en términos cualitativos y cuantitativos. Su principal logro, sin duda, fue haber forzado la apertura de un proceso democratizador en el Estado que puso fin al monopolio de la representación sindical en el Consejo de la Función Pública y el IPAP (Instituto Provincial de Administración Pública) y regularizó la relación contractual de más de 8000 trabajadores con el pase a planta permanente.
ATE pasó de estar presente en cinco municipios a más de 30 y cuadruplicó la cantidad de afiliados hasta alcanzar los 11 mil trabajadores organizados, en un proceso fortalecimiento y democratización del poder territorial que significó la apertura de siete nuevas seccionales.
El Congreso provincial contará con la presencia de dirigentes de la conducción nacional del gremio, entre ellos el secretario general, Hugo Godoy; el secretario adjunto, Julio Fuentes; y el secretario de Administración, Eduardo de Gennaro. Juntos, por la tarde, inaugurarán un viejo anhelo de ATE Río Negro: la nueve sede provincial, que estará ubicada en Irigoyen 213 de la ciudad capital.
