En este marco el Ejecutivo propuso una suma fija no remunerativa de 4.000 pesos, al igual que a nivel nacional y provincial, a cuenta de futuros acuerdos salariales. La misma sería de carácter retroactiva al mes de febrero, con lo cual en marzo y abril en lugar de 4.000 mil se cobrarían 6.000 pesos de incremento.
“Vamos a evaluar la propuesta en asamblea y llevar una respuesta el próximo martes, fecha en la que quedó pautada una nueva reunión con el Ejecutivo”, señaló Leticia Lapalma, secretaria general adjunta de ATE Río Negro, quien además remarcó la importancia de estar participando de esta instancia con la que se puso fin a la discriminación sindical que imperó en la ciudad capital hasta ahora.
Cabe destacar que desde el sindicato se dejó asentado en el acta que esta pauta salarial podría ser discutida, y en todo caso aprobada, siempre y cuando este incremento sea pensado como un adelanto y la discusión salarial se siga dando de manera trimestral.
“Se deben tener en cuenta los índices de inflación que en nuestra ciudad son muy importantes y no tienen que ver solamente con el índice nacional. Además, solicitamos que se vaya incorporando al básico y demandamos un aumento en el adicional por trabajo insalubre y la revisión de las asignaciones familiares”, detalló Lapalma.
Cabe destacar que si bien se dio prioridad a la discusión salarial, ATE llevó a la reunión un extenso pliego de reivindicaciones: reforma del estatuto municipal, paritarias libres, cumplimiento estricto de las leyes laborales, cumplimiento efectivo del cupo trans y el cupo por discapacidad y a la efectivización del artículo 10 del estatuto municipal, que prioriza el ingreso de hijos de trabajadores fallecidos durante el ejercicio de su vida laboral activa.
