La Unidad Fiscal de Investigaciones (UFI) se comunicó con la conducción provincial de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), a los efectos de ponerla en conocimiento que ese organismo judicial decidió iniciar una investigación a partir de los graves hechos que fueron conocidos luego de lo publicado por el gremio en la ciudad de Cipolletti.
La entidad sindical pudo comprobar que más de 10.000 jubilados, que se encuentran empadronados como beneficiarios del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (INSSJP-PAMI) en la mencionada ciudad, son víctimas desde hace mucho tiempo de las irregularidades en la atención de los médicos de cabeceras propuestos por la obra social.
«Este es un hecho sin precedentes en el país. Nunca nos hubiéramos imaginado que los jubilados podrían ser medicados sin atención médica y menos aún que se llegaran a colocar urnas para ese fin», subrayó Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE Río Negro. «Coincidimos con la primera impresión de la fiscalía y creemos que podemos estar en presencia de varios delitos, ya que hay importantes intereses económicos en juego, además de poner en serio riesgo la salud de las personas», advirtió finalmente el dirigente rionegrino.
Por su parte, Rodrigo Vicente, Coordinador Nacionales de ATE Río Negroaseguró: «Los trabajadores vamos a colaborar con la investigación y aportar toda la información que esté a nuestro alcance. Destacamos la intervención de las autoridades locales del PAMI, ya que dentro de los plazos previstos están buscando soluciones».
El Frente Previsional (FP) conformado por ATE indicó que los jubilados son medicados a través de un sistema de urnas instaladas en los consultorios médicos. La finalidad de las mismas es que los afiliados coloquen sus requerimientos de medicación y luego, una vez transcurridos de 3 a 7 días, pasen a retirar las recetas ya confeccionadas, sin que exista contacto previo durante meses, y en algunos casos años; con el profesional médico que debería garantizar su contención y atención.
En algunos ejemplos extremos, el sindicato descubrió que los médicos llegaron a prescribir medicación a jubilados que ni siquiera conocieron en persona.
Se trata de un hecho gravísimo sin precedentes en el país y tanto ATE, como los fiscales intervinientes, coinciden que pueda tratarse de la comisión de varios delitos; afectando así el patrimonio de la obra social, beneficiando la industria farmacéutica y poniendo en serio riesgo la vida de todos los beneficiarios.
Desde la UFI, que funciona en Buenos Aires, comenzaron a requerir información probatoria al gremio y no descartaron en el corto plazo viajar hasta las oficinas de PAMI en Cipolletti para continuar con las actuaciones.
Cabe recordar que la denuncia también señalaba que los jubilados tenían que abonar un costo, un plus o un arancel diferenciado por cada una de las recetas.
– Se destaca rápida respuesta de las autoridades locales –
Por otro lado, el sindicato destacó la presencia en la ciudad del Director Ejecutivo de la obra social de los jubilados en Río Negro, Leandro Zacarias, quien personalmente se reunió con todos los trabajadores y comenzó a esbozar soluciones conjuntas a las problemáticas existentes desde hace tiempo en la agencia local.
Para los empleados cipoleños resulta importante que se haya autorizado a los médicos auditores de la Institución para que ejerzan un contralor serio sobre el nivel de atención médica que reciben los adultos mayores.
Para ampliar información comunicarse con:
Rodolfo Aguiar │ Secretario General ATE Río Negro (298) 4502024
Rodrigo Vicente │ Coord. Nacionales ATE Río Negro (298) 4946075