Hace ya largo tiempo que la Central Obrera viene denunciando el atropello de quienes están al frente de la reconocida Casa de la Cultura, los Coordinadores Ricardo Peinado y Karina Acosta, sobre quieres también pesa el manejo poco claro de la cuentas administrativas.
Es que a la larga lista de denuncias que pesan hace más de tres años sobre esta gestión, ayer se sumó un nuevo capítulo, cuando los trabajadores/as del bar que funciona dentro del edificio se encontraron con las puertas cerradas con candados, impidiéndoles el ingreso para cumplir con sus tareas. De este modo, volvieron a poner en jaque las fuentes laborales de los empleados, como lo hicieran años atrás con el área de prensa, administración y técnica.
«No nos sorprende esta actitud hacia los trabajadores de parte de quienes están al frente de la histórica Casa de la Cultura. Hemos dejado en varios oportunidades en claro su actitud violenta y maltratadores hacia quienes se desempeñan en dicha institución», señaló al respecto Zulma Dávila, Secretaria de Derechos Humanos de la CTA Fisque Menuco y manifestó la solidaridad y el acompañamiento a los trabajadores/as.
De este modo, la CTA denuncia el manejo espureo de quienes haciendo abuso de sus cargos avanzan en la destrucción de una institución emblemática que lleva más de 40 años de actividad en esta ciudad.
