En un fuerte reclamo por Justicia, laCentral de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma se movilizó junto a sus sindicatos de base, organizaciones y movimientos sociales en el inicio del juicio oral y público por la desaparición forzada de Daniel Solano.
«En el banquillo de los acusados faltan los autores intelectuales y los cómplices que garantizaron impunidad durante todo este tiempo», reclamó Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE y CTA Río Negro y completó: «Este fue un crimen por encargo para frenar reclamos laborales. Los trabajadores tenemos que exigir justicia plena en este juicio».
Es que si bien los policías Sandro Gabriel Berthe, Pablo Federico Bender, Juan Francisco Barrera, Pablo Andrés Albarrán Cárcamo, Pablo Roberto Quidel, Diego Vicente Cuello y Héctor César Martínez llegan al inicio del juicio como imputados -con distintos grados de participación acusados por desaparición forzada de persona, vejaciones, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público- resta individualizar a los autores intelectuales del crimen del trabajador rural.
En este sentido, para la CTA rionegrina se trata de un crimen de Estado, ya que desde aquel momento existieron complicidades de distintos sectores del poder político, judicial y del empresariado nacional y extranjero que opera en la provincia.
Solano prestaba servicios para la multinacional EXPOFRUT en la localidad de Lamarque y un día antes de su desaparición manifestó la intención de organizarse junto a sus compañeros en la defensa de los derechos laborales. La última vez que se lo vio con vida fue cuando fue sacado por la Policía rionegrina de un boliche en el valle medio.