Miles de pecheras verdes con el logo de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) protagonizaron hoy el masivo acto con más de 15 mil trabajadores frente a la Casa de Gobierno en Viedma, para exigir un cambio en la política económica que orienta el Presidente Macri.
Desde temprano, los organismos nacionales en la provincia se encontraron vacíos por el llamado a un paro de 24 horas. No hubo atención en ANSES, PAMI, SENASA, Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, Agencia Nacional de Discapacidad, Subsecretaria de Agricultura Familiar, Minería, INTI ni en la Universidad Nacional del Comahue (UNCo).
«Este gobierno de Macri dialoga sólo con Wall Street y la banca financiera internacional. No podemos equivocar el camino: nuestro camino no debe ser el diálogo, sino el de la multiplicación de todas las protestas cono única salida para frenar el ajuste», expresó desafiante desde el palco el secretario general de ATE y la CTA Autónoma, Rodolfo Aguiar.
«Debemos profundizar todos los planes de lucha para lograr cambiar el gobierno en el 2019», agregó el dirigente.
Numerosas fueron las conquistas que el sindicato alcanzó durante el último año a partir de su demanda en las calles: la contratación de 600 trabajadores que eran precarizados y explotados mediante el sistema de becas; el incremento del 70% y en un solo pago del valor de indumentaria para 17 mil estatales; la incorporación de ATE al Consejo de la Función Pública con la decisión unánime de la Legislatura, lo que puso fin a la discriminación que sufrían sus afiliados; el aumento del 122% en asignaciones familiares –ahora una de las más altas del país- y el percibimiento de las guardias y horas extras del personal de salud y los haberes de porteros de escuela dentro de los primeros días del cronograma de pago.
El paro afectó además a las dependencias de la provincia. Por ejemplo, no hubo clases por la adhesión total de los porteros de escuela, los hospitales funcionaron sólo con guardias mínimas en todos sus servicios, al igual que los centros asistenciales del Ministerio de Desarrollo Social y la SENAF. Tampoco hubo atención en otras áreas que dependen del Ministerio de Gobierno como los Registros Civiles, de la Propiedad Inmueble, Personas Jurídicas, Turismo y Deporte, Departamento de Aguas y la obra social provincial IPROSS.
«Los salarios de los estatales no pueden quedar por debajo de la inflación. La contundencia que tuvo el paro también debe ser advertida por la provincia y la última oferta salarial tiene que ser mejorada», dijo Aguiar, en referencia a la magra propuesta de 1500 pesos para los empleados públicos, que no logra acercarse a la proyección inflacionaria que superará el 30%.
En ese sentido, ante la consulta de medios periodísticos, el dirigente ratificó que Río Negro no escapa a los lineamientos de la política económica del Gobierno nacional, aunque la intensidad del impacto de la crisis depende en gran parte del gobernador Weretilneck.
Desde temprano, los organismos nacionales en la provincia se encontraron vacíos por el llamado a un paro de 24 horas. No hubo atención en ANSES, PAMI, SENASA, Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, Agencia Nacional de Discapacidad, Subsecretaria de Agricultura Familiar, Minería, INTI ni en la Universidad Nacional del Comahue (UNCo).
«Este gobierno de Macri dialoga sólo con Wall Street y la banca financiera internacional. No podemos equivocar el camino: nuestro camino no debe ser el diálogo, sino el de la multiplicación de todas las protestas cono única salida para frenar el ajuste», expresó desafiante desde el palco el secretario general de ATE y la CTA Autónoma, Rodolfo Aguiar.
«Debemos profundizar todos los planes de lucha para lograr cambiar el gobierno en el 2019», agregó el dirigente.
Numerosas fueron las conquistas que el sindicato alcanzó durante el último año a partir de su demanda en las calles: la contratación de 600 trabajadores que eran precarizados y explotados mediante el sistema de becas; el incremento del 70% y en un solo pago del valor de indumentaria para 17 mil estatales; la incorporación de ATE al Consejo de la Función Pública con la decisión unánime de la Legislatura, lo que puso fin a la discriminación que sufrían sus afiliados; el aumento del 122% en asignaciones familiares –ahora una de las más altas del país- y el percibimiento de las guardias y horas extras del personal de salud y los haberes de porteros de escuela dentro de los primeros días del cronograma de pago.
El paro afectó además a las dependencias de la provincia. Por ejemplo, no hubo clases por la adhesión total de los porteros de escuela, los hospitales funcionaron sólo con guardias mínimas en todos sus servicios, al igual que los centros asistenciales del Ministerio de Desarrollo Social y la SENAF. Tampoco hubo atención en otras áreas que dependen del Ministerio de Gobierno como los Registros Civiles, de la Propiedad Inmueble, Personas Jurídicas, Turismo y Deporte, Departamento de Aguas y la obra social provincial IPROSS.
«Los salarios de los estatales no pueden quedar por debajo de la inflación. La contundencia que tuvo el paro también debe ser advertida por la provincia y la última oferta salarial tiene que ser mejorada», dijo Aguiar, en referencia a la magra propuesta de 1500 pesos para los empleados públicos, que no logra acercarse a la proyección inflacionaria que superará el 30%.
En ese sentido, ante la consulta de medios periodísticos, el dirigente ratificó que Río Negro no escapa a los lineamientos de la política económica del Gobierno nacional, aunque la intensidad del impacto de la crisis depende en gran parte del gobernador Weretilneck.