Es que, sin contar con Juez de Garantías ni haberse emitido orden de desalojo, Herrera llegó hasta el lugar de la protesta y advirtió que los manifestantes contaban con un plazo de cuatro horas para dejar el lugar o se desalojaría mediante el uso de la fuerza.
Con esto, el fiscal demuestra claramente no conocer el espíritu del Nuevo Código de Procedimiento de la provincia que, en su artículo 14, plantea que los jueces y los fiscales deben procurar la solución del conflicto primario que dio origen el hecho.
Al mismo tiempo, dado que no se cuenta con ningún tipo de orden de desalojo, no puede un fiscal intimar de manera irresponsable a los trabajadores a retirarse cuando están, en forma pacífica, ejerciendo su derecho de huelga en el lugar donde cumplen tareas laborales. Infundir miedo o tratar de intimidar no son las mejores herramientas para resolver un conflicto, sino que lo agudizan.
El Sindicato denuncia que la fiscalía no actúa como mediador y que lo hace sin Juez de Garantías
Cabe señalar que, por otro lado, tampoco se podría realizar el desalojo de una permanencia durante la noche, ya que sería totalmente ilegal. En este punto es lamentable que Herrera se muestre ignorante de las leyes vigentes.
Sorprende la actitud del fiscal que en lugar de mostrar una postura en pos de resolver el conflicto, interviniendo como mediador y convocando al diálogo, se muestre inflexible y hasta denote un ejercicio abusivo de sus facultades.
Pese a la sorpresa, porque va a contracorriente de lo que plantea el Ministerio Público Fiscal de la provincia, se pueden encontrar antecedentes nefastos de Herrera contra el Sindicato de los estatales. Basta con señalar que hace algunos años el funcionario, excediendo las normas y leyes vigentes, en conflictos que tenían como partícipes a lo estatales, pidió cárcel para los dirigentes por protestas que tuvieron lugar en Cincos Saltos y Catriel.
Por otro lado, no se descarta que éste sea una accionar revanchista del funcionario tras su frustrada candidatura a la Procuración Provincial, teniendo en cuenta que esta actitud confronta de lleno con la mirada mucho más razonable que plantea el nuevo Procurador desde el Ministerio Público Fiscal.
Atento a esto, desde ATE se demanda a Herrera que recapacite y disponga una actitud adulta en torno a restablecer la armonía entre las partes, propiciando el diálogo en la búsqueda de una solución. Más aún, teniendo en cuenta que es un conflicto laboral y que la intervención del poder punitivo del Estado no tiene razón de ser.