La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) Seccional Allen se declaró en estado de alerta y asamblea permanente en el Hospital de Fernández Oro frente a las diversas situaciones que se viven en el nosocomio por el accionar poco claro de su directora, a quien se le solicitó una reunión hace más de 20 días. La misma finalmente será brindada el 30 de abril.
El sindicato viene manifestando su objeción a la conducción de Mabel Raviola, quien maneja de manera poco clara los ingresos del personal, la concesión de la compra de las viandas de alimentos, la distribución de los puntos de guardias y horas extras que son distribuidas de manera dirigida y beneficiando a un grupo de personas allegadas al poder.
Es por esto que en asamblea se llegó a la decisión de solicitar una reunión con la dirección para aclarar estos temas, entre otros. Sin embargo, Raviola eludió permanentemente la audiencia, demorando la fecha del encuentro.
“Hemos solicitado 2 audiencias con anterioridad las cuales han sido postergadas por Raviola. Creemos que si estuviera en el hospital de forma clara y transparente no habría necesidad de postergar tantas veces una reunión», destacó Carolina Suárez Secretaria General Adjunta de ATE Seccional Allen, quien señaló asimismo que la directora genera división y trato desigual ante los trabajadores, operando con impunidad.
«Queremos hacerle llegar el mensaje a la directora de este hospital, que ATE llegó a Fernández Oro para quedarse, defender y garantizar los derechos de cada uno de los trabajadores», concluyó por su parte Andrea Pravata Secretaria Administrativa de la Seccional Allen.
