La mayoría de estos empleados, que se encuentran absolutamente precarizados en sus puestos laborales, fueron echados por el funcionario Daniel Badié, ya que prestan servicios en la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF). En tanto que el resto de los reinstalados en sus sectores cumple funciones en las localidades de El Bolsón y General Conesa.
«Estamos frente a un gran logro de ATE, porque se salvan fuentes laborales que -aunque de bajos ingresos- permiten contener a numerosas familias. Destacamos el diálogo y el acuerdo por la reincorporación, pero alertamos sobre nuevas cesantías en el corto plazo, ya que la gestión se deshumaniza a pasos agigantados e insiste con ajustar a cualquier precio», destacó el Secretario Adjunto de ATE Río Negro, Aldo Capretti y agregó que “no solo este Gobierno miente cuando sus funcionarios hablan, sino que ni siquiera cumple con lo que firma. En este momento los trabajadores precarizados están siendo víctimas de las internas que tienen las autoridades de Desarrollo Social y de 390 becados que había a fin de año, ahora ya superan los 500″.
En tal sentido el Sindicato destaca la instancia de diálogo con las autoridades que permitió la revisión de estos casos, pero alerta sobre posibles nuevas cesantías a producirse en los próximos días, teniendo en consideración que resulta visible la intención del gobierno de Alberto Weretilneck de continuar con el achique y ajuste en el Estado, dando de baja a numerosos vínculos laborales que se sostienen bajo el régimen de becas.
Los empleados habían sido cesanteados en la Secretaría de Niñez y Adolescencia en Viedma, El Bolsón y General Conesa
Por último, la entidad gremial manifiesta que el escenario en relación al recurso humano en el Ministerio de Desarrollo Social es mucho peor que a finales del año pasado, si se tiene en cuenta que el Gobierno no cesó con la incorporación de becados para cubrir vacantes en distintas áreas y que según cálculos propios ya vuelven a superar ampliamente los 500 casos.