Se trata de Carlos Salazar, quien fue detenido en esta ciudad la noche del sábado y encontrado posteriormente ahorcado en su celda. Para el fiscal Luciano Garrido, quien brindó detalles tras la autopsia, se trataría de un suicidio, que habría sido llevado a cabo por el joven utilizando la manga de un buzo.
Sin embargo, la causa está caratulada como «estrangulamiento por ahorcamiento» y los familiares y amigos de Salazar tienen razones para dudar de la versión oficial, ya que ni siquiera saben porqué fue detenido y aseguran que al joven lo mataron en el interior de la comisaría. Además, Salazar, quien trabajaba como lavacoches en esta ciudad, nunca manifestó intención de quitarse la vida.
En este marco, la Central Obrera deja en evidencia que una vez más se trata de un joven de bajos recursos que es muerto en una comisaría, como tantos otros casos computados en el último tiempo, que siguen engrosando las listas de víctimas por violencia institucional.
Por esta razón, desde la CTA se considera vital que se investigue y se esclarezca el caso para que haya justicia. Son sabidos los recurrentes excesos de la fuerza policial, especialmente sobre jóvenes y pobres, que son quienes más abundan en las comisarias, donde muchas de las víctimas no llegan a hacer las denuncias.
