Luego de realizada la reunión paritaria para la discusión salarial entre las autoridades del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (INSSJyP-PAMI) y la aceptación por parte de UPCN y UTI de una magra recomposición en los ingresos del personal, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) decidió manifestar su más absoluto rechazo y convocar a un Paro Total de actividades por 24 horas para mañana en todas las oficinas de la provincia.
Es que el acuerdo de la baja salarial para el 2017 contempla solo un incremento del 21% dividido en tres cuotas no acumulativas (7% en junio, 7% en julio y 7% en agosto) para terminar de percibirlas recién en el mes de septiembre.«Es una vergüenza e irresponsabilidad la sobreactuación del Instituto, junto a sus gremios amigos, a la hora de imponer el ajuste en el incremento salarial 2017, que no solo nos hace perder poder adquisitivo, sino que también pretende beneficiar solo a una franja de los empleados», cuestionó Rodrigo Vicente, Delegado Sindical de ATE PAMI y Coordinador de Trabajadores Nacionales de ATE Río Negro y agregó que «el año pasado las condiciones laborales e institucionales eran las mismas y el incremento fue mayor, advertimos que puede existir un mal uso de los fondos para costear gastos en las próximas elecciones nacionales».
El Gremio considera que existió complicidad de algunas organizaciones sindicales, si se tiene en consideración que la inflación calculada y proyectada hasta el mes de diciembre de este año -aún en las mediciones de las consultoras más moderadas o el propio INDEC- se ubicará entre los 25 y 28 puntos. La connivencia de éstos también se refleja en la resignación del reclamo del 8% del poder adquisitivo perdido durante el período 2016.
Es que el acuerdo de la baja salarial para el 2017 contempla solo un incremento del 21% dividido en tres cuotas no acumulativas (7% en junio, 7% en julio y 7% en agosto) para terminar de percibirlas recién en el mes de septiembre.«Es una vergüenza e irresponsabilidad la sobreactuación del Instituto, junto a sus gremios amigos, a la hora de imponer el ajuste en el incremento salarial 2017, que no solo nos hace perder poder adquisitivo, sino que también pretende beneficiar solo a una franja de los empleados», cuestionó Rodrigo Vicente, Delegado Sindical de ATE PAMI y Coordinador de Trabajadores Nacionales de ATE Río Negro y agregó que «el año pasado las condiciones laborales e institucionales eran las mismas y el incremento fue mayor, advertimos que puede existir un mal uso de los fondos para costear gastos en las próximas elecciones nacionales».
El Gremio considera que existió complicidad de algunas organizaciones sindicales, si se tiene en consideración que la inflación calculada y proyectada hasta el mes de diciembre de este año -aún en las mediciones de las consultoras más moderadas o el propio INDEC- se ubicará entre los 25 y 28 puntos. La connivencia de éstos también se refleja en la resignación del reclamo del 8% del poder adquisitivo perdido durante el período 2016.
El Sindicato considera que existió complicidad para bajar los salarios y achicar la cobertura de la obra social de los jubilados
Por otro lado, la entidad sindical interpreta que el aumento del adicional por reintegro de guardería es insuficiente, al igual que la cuantificación de los viáticos que serán convertidos a Unidades Retributivas (UR). ATE repudia que los funcionarios de la obra social intentaran mezclar estos conceptos en la discusión salarial, sobre todo porque los mismos son percibidos por una franja muy pequeña de la totalidad del recurso humano de la Institución.
El Sindicato también insistió con la demanda de pase a plata permanente de todos los contratados, compromiso firmado en paritarias e incumplido hasta el momento por las máximas autoridades.
Por último, desde ATE se cuestiona la pasividad y el aval otorgado por estos sectores gremiales al sistemático recorte de prestaciones que sufren las jubiladas y los jubilados rionegrinos, señalando que se quedan sin medicamentos, sin programas sociales preventivos que son desfinanciados y que deben costear de su propio bolsillo las prácticas médicas de baja, mediana, alta complejidad y pagar plus hasta para lograr la atención de los médicos de cabecera.
El Sindicato también insistió con la demanda de pase a plata permanente de todos los contratados, compromiso firmado en paritarias e incumplido hasta el momento por las máximas autoridades.
Por último, desde ATE se cuestiona la pasividad y el aval otorgado por estos sectores gremiales al sistemático recorte de prestaciones que sufren las jubiladas y los jubilados rionegrinos, señalando que se quedan sin medicamentos, sin programas sociales preventivos que son desfinanciados y que deben costear de su propio bolsillo las prácticas médicas de baja, mediana, alta complejidad y pagar plus hasta para lograr la atención de los médicos de cabecera.
