La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) denuncia que el Coordinador de Sanidad Animal e Inocuidad de los Alimentos, Gustavo Comesaña hostiga a los trabajadores del SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) de manera permanente hasta en comunicaciones oficiales. El maltrato y la violencia laboral desplegadas por este funcionario queda de manifiesto, incluso, en las comunicaciones oficiales, donde trata de ‘opas’ a los trabajadores que de él dependen.
Mediante este adjetivo despectivo -que, por definición se refiere a tonto, retrasado mental, falto de entendimiento o razón- Comesaña se dirigió a los trabajadores que cumplen funciones en las oficinas de Sanidad Animal, demandando que los empleados hagan frente a los cambios burocráticos que se comienzan a aplicar en el organismo.
Repudiable actitud de Coordinador de SENASA demuestra el constante hostigamiento y violencia laboral en el organismo
Concretamente, en una comunicación formal vía correo electrónico, en la que informaba sobre la obligatoriedad de aplicar un nuevo procedimiento para el traslado de equinos, luego de detallar los pasos a seguir, el Coordinador cierra la comunicación con la leyenda «instructivo para opas».
«Vamos a avanzar en el pedido formal de investigación sumarial contra este funcionario ante sus repudiables dichos, que claramente reflejan el maltrato cotidiano que impera en el sector”, manifestó Rodrigo Vicente, Coordinador de los Trabajadores Nacionales de ATE Río Negro y agregó: «No debemos olvidar que este funcionario carga con la responsabilidad de haber sido quien le negó derechos a una trabajadora veterinaria que, fruto de las negligencias de Comesaña, perdió la vida en un accidente automovilístico cuando se desvaneció en ruta”.
Sobre esta situación que rememora Vicente, desde el Sindicato se insistirá con el pedido de investigación sumarial a fin de poner de manifiesto el constante autoritarismo del funcionario en cuestión.
«Nos siguen llegando denuncias de maltrato laboral por parte de funcionarios del SENASA Regional Patagonia Norte. Es inaceptable que el organismo no tome medidas al respecto cuando se trata de las mismas personas que tiempo atrás, por su autoritarismo dejaron morir en la ruta a una trabajadora veterinaria», sumó el referente sindical y culminó: «Durante la semana próxima, vamos a realizar una jornada de trabajo con los Delegados del sector para analizar las acciones necesarias para terminar con estas práctica violentas».
Una tragedia evitable parar recordar
A principios del año, una médica veterinaria que padecía Diabetes Tipo 1 (Insulina dependiente), tras sufrir recurrentes hipoglucemias, desmayos y pérdidas de conocimiento, solicitó a sus jefes el traslado a la provincia de Córdoba, a fin de ser asistida por sus familiares.
Su tarea habitual consistía en supervisar establecimiento de Cipolletti, ciudad en la que residía. Pero por indicación médica, la trabajadora presentó este pedido de manera conjunta tanto al Director de la Regional, Ricardo Sánchez como al Coordinador de Sanidad Animal e Inocuidad, Gustavo Comesaña.
Sin embargo, en vez de hacer lugar al pedido, no solo le negaron la posibilidad de reubicación sino que además, en el transcurso de los días, ampliaron su radio de trabajo, enviándola a supervisar un establecimiento ubicado en Chimpay, teniendo que recorrer más de 170 kilómetros sobre la peligrosa Ruta Nacional 22 de manera cotidiana.
Lamentablemente, la trabajadora sufrió una descompensación en plena ruta y despistó, cayendo con su automóvil a un desagüe. Fue asistida por algunos automovilistas que circulaban por el lugar, pero tras el accidente quedó internada en Terapia Intensiva, falleciendo a las 48 horas del suceso.
